Cómo dar las gracias

dar las gracias

Yo siempre lo hago como me enseñaron desde chiquito, con la palabra mágica. Digo "gracias". También doy las gracias con mi fotografía. Me han llamado de tres fundaciones sin ánimo de lucro a pedirme ayuda con mi cámara. Me cuentan sobre los proyectos en los que están trabajando y en las tres ocasiones he dicho que cuentan conmigo. Acepto encantado. De esta manera siento que con mi trabajo, también puedo darle gracias a Dios. Agradezco la llamada que me hicieron Las Golondrinas, Debra Colombia y Funcolombiana de Leucemia Linfoma. Y si me siguen llamando ellos u otras fundaciones, haré lo mismo. Es un honor.

Y si este trabajo ayuda a cambiar vidas, con mayor razón. Que dicha poder tener la oportunidad de ayudar y ser útil haciendo lo que más me gusta. No hay nada detrás, ni intereses, ni maneras de aprovecharse económicamente, ni tratar de llevar el negocio a otro nivel. Creo que habrá también un espacio de tener oportunidades para mejorar en un negocio. Pero cuando la intención es ayudar, no hay un rincón para el negocio o para pensar en beneficiarse de eso. Apoyar un proyecto de una fundación bien encaminada es también una manera de agradecer. Eso me gusta y me hace sentir mejor persona. Lo invito a que haga la prueba.

¿Dónde empezó mi agradecimiendo?
Hace unos años sigo a David Hobby. Es un fotógrafo gringo al que le dicen 'Strobist' y me ha enseñado muchas cosas para la vida profesional y personal. Me enseñó sobre los flashes y a pensar cómo usarlos creativamente. Lo sigo siempre. De hecho, su página, strobist.com la tengo por defecto en mi navegador, ya que constantemente está aportando conocimiento y compartiendo información. Además de ser un excelente profesor, es una persona increíble, generosa, amable y buen ciudadano. Tuve el placer de conocerlo personalmente y asistir a un seminario que dictó en Londres hace un par de años larguitos. Le pedí abrazo. Nos abrazamos.

Dentro de las cosas que enseña Strobist es a trabajar con la comunidad que nos rodea. David invita a que salgamos al encuentro de las cosas que están a nuestro alrededor y que nos gustan. Sacar la cámara y provocar que pasen las cosas. Escribir sobre experiencias con la comunidad. Tomarle fotografías a almacenes, restaurantes, personalidades, etc. Descubrir temas que andan por ahí y que aunque cotidianos, pueden resultar en una ampliación del horizonte. Por eso creó el blog que le dedica a su comunidad: HOCO360. Si puede, sígalo.

Y le hice caso a Strobist. Salí a caminar y me encontré con Nick's, Buenos Muchachos, Diletto Café, con el proceso de una Ternera a la Llanera; en Lima visité La Sanguchería La Lucha. Pero sin irse tan lejos, me acuerdo de la visita que le hice a La Casa del Folclor en Neiva: me dejaron pasar a la cocina a hablar con las cocineras y a tomarle fotos a su entorno. Delicioso.

Generalmente me recomiendan algún sitio o sencillamente me encuentro con ellos y me parece chévere hacer que pasen las cosas, es decir, presentarme, hablar con los dueños o administradores y comentarles sobre mi gusto por la comida y por la fotografía. Nunca me han cerrado una puerta. Siempre me invitan a seguir y me dejan tomar fotos.

En el caso de las fundaciones, lo que más me gusta es que me han buscado ellos y para mí, repito, es una verdadera alegría poder servirles. Y lo seguiré haciendo. Porque para mí eso significa estar agradecido en la vida.





Soy Pablo Salgado Barrientos (39). Fotógrafo. Periodista. Colombiano.